domingo, 31 de marzo de 2013

Oportunidad

Dicen, y debe ser cierto, que nuestra juventud está más que suficientemente preparada. Pero al estar la economía (la productiva y la otra) como está, por los suelos, esta generación (perdida, y siento decirlo) está falta de oportunidades en su propio país, y se ve obligada a buscarlas fuera, ya sea en América, ya en Europa, con contados resultados de éxito. Y eso que la acogida en los países latino-americanos es extraordinaria. Concretamente, a México (pues me toca muy de cerca), sólo le puedo dedicar palabras de agradecimiento y de cariño.

El problema, ya siendo fuerte el que menciono, no es ese, no exactamente. Porque ocurre que a la derecha que nos gobierna en la actualidad es lo que le conviene, precisamente. La igualdad de oportunidades le importa un bledo. Voy a más. A esta derecha que nos [des]gobierna le interesa especialmente ese desequilibrio en  igualdad de oportunidades. Es por eso que está preparando el terreno para que futuras generaciones crezcan y se desarrollen de esta manera: unos pocos tendrán acceso a niveles de clase privilegiada, con dinero y con poder. Y el resto, la gran mayoría, convertidos en borregos que o bien se harán con puestos de trabajo de ínfima calidad en todos los sentidos, o bien engrosarán las filas del ejército que se verá obligado a "luchar" para subsistir en otros países, provocando entre ellos un enorme daño a causa del desarraigo (el obligado, no el elegido por voluntad propia).

Como decía, el sufrimiento que esto provoca es desgarrador. La familia española está rota. No entiendo cómo la jerarquía católica apostólica y romana no se vuelca contra los que realmente están dinamitando la base de nuestra sociedad, la familia. Pues la ruptura que la derecha está provocando es más económica que geográfica (que también). Esta derecha que hoy nos [des]gobierna usando armas democráticas nos está sometiendo a una dictadura sin límites, haciéndonos sufrir como nunca, un sufrimiento sólo comparable al padecido en la última guerra civil.

5 comentarios:

Unknown dijo...

http://ow.ly/jBwYk Y los alemanes, se aprovechan de la coyuntura.

Víctor dijo...

No sé Antonio. Yo creo que el verdadero crimen contra la educación pública y contra el progreso de este país se cometió el día en que se decidió (y no por la derecha precisamente) que no se podía exigir a todo el mundo lo mismo, y que evaluar era poco menos que fascista. Desde entonces, un título no vale ni el papel en el que está escrito, y eso es campo abonado para los contactos y para el enchufismo. Se acabó con la función de promoción social que desempeñaba la educación pública. ¿Y qué trabajo pretende desempeñar una persona que no sabe nada de nada? ¿Qué empresa puede nacer y ponerse a contratar a nadie, si no hay ideas, ni disposición o capacidad para mejorar en nada lo que ya existe? Y los alemanes, ¿qué culpa tienen de todo esto?

Un abrazo

Víctor dijo...

¡Hola de nuevo Antonio! Releo ahora mi comentario, y creo que me quedó demasiado seco y terminante, jeje.. No era esa mi intención, es sólo que lo debí escribir demasiado rápido. Aunque no pensamos de la misma forma en muchas cuestiones, ya sabes que te aprecio sinceramente. Un abrazo :-)

Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Unknown dijo...

Un saludo, querido Víctor. Se positivamente que lo que escribes lo pones con la mejor intención. Aunque sí es cierto que no vi en tu respuesta mucha relación con mi entrada (me despistó tu comentario sobre el sistema educativo, pero la respeto igualmente, aunque, como bien dices, en muchas ocasiones no compartamos opinión). Cuando mencioné "alemanes" quise decir "Alemania". Vaya por delante y admiración y cariño por el pueblo alemán.
Tengo un poco abandonado este espacio en la Red. Estoy buscando un tema agradable del que hablar y no lo encuentro... ;-)
Un afectuoso saludo, Víctor.