sábado, 27 de diciembre de 2008

El mercado de abastos

A la vista de la crisis que estamos sufriendo unos cuantos miles de millones personas en el mundo por culpa de unos pocos de miles de codiciosos, dueños del libre mercado especulativo y fraudulento, me quedo sólo con el mercado de abastos, el tangible, donde se compra y se vende algo que se ve y se palpa, como el de la foto, la lonja del mercado central de abastos de Jerez, "la Plaza".
El otro, el mercado de valores, la bolsa, ya debería estar cerrado. Al fin y al cabo, las empresas que realmente mantienen la economía no cotizan en bolsa, la pequeña y mediana empresa, la que aporta valor al producto con su trabajo, sin maniobras raras, sin chanchullos.

¿Cómo puede ser que el futuro de una empresa constructora - y sus cientos de puestos de trabajo- dependa de que venda su participación en una empresa de petróleo? Algo habrá que hacer para que todo esto no vuelva a ocurrir. Por lo pronto leer opiniones. Como la de Alfonso Guerra, en un artículo publicado en la revista TIEMPO titulado "¿Crisis del capitalismo?". Por supuesto te recomiendo que lo leas (me lo ha pasado el compañero Carlos Benítez). Además de quedarme con la frase que se destaca en el artículo, "La gravedad mayor de lo que está sucediendo en el capitalismo mundial es que los afectados por tanta irresponsabilidad y estafa se ven obligados a aceptar que con el dinero de sus impuestos se auxilie a los ladrones...", y que aboga por plantear posturas socialdemócratas, apunto su cita de Bertolt Brecht: “¿Cuál es el más grave delito, atracar un banco o fundarlo?”.

En la sección de opinión de EL PAIS, Manuel de la Rocha Rubí, argumenta muy bien en su artículo "Los costes del despido como ideología" la nula efectividad que contra la crisis tiene la postura neoliberal sobre abaratar los despidos. Destaco "...de la actual crisis ni son causantes ni tienen culpa directa o indirecta los trabajadores..." y "Los hechos vuelven a demostrar que el principio neoliberal de que la búsqueda de la mayor ganancia individual conlleva el mayor bienestar colectivo es falso".

Ya es hora de plantearse cambios drásticos en el sistema económico. Si los bancos no responden a la demanda de la sociedad, habrá que plantearse una acción directa del Estado a través, por ejemplo, de las cajas de ahorro.

Cerrar las bolsas. Los que están metidos en ese ajo le llaman "el juego de la bolsa". Pues no estamos para juegos, mire usted. Hay días que están cerradas y no se hunde el mundo. Y ha habido épocas en que ni siquiera existían, y el mundo progresaba. Así nos libraríamos de uno de los baluartes de la especulación.

Estatalizar actividades consideradas como fundamentales para la vida: agua, gas electricidad, comunicaciones, por ejemplo. ¿Cómo se puede especular con el agua, cómo hablar de producir beneficios empresariales con este bien escaso? ¿No está todo el mundo (o casi) de acuerdo con la Sanidad y la Educación públicos? Pues hagamos esto extensivo a otros sectores fundamentales como los mencionados. O la vivienda, ¿no es constitucional el derecho a una vivienda digna? pues quitémosla del "libre (y nefasto) mercado".

sábado, 20 de diciembre de 2008

Javier Pérez Royo: Estadolatría

En EL PAIS del pasado 20 de diciembre publica Pérez Royo un magnífico artículo sobre el laicismo en España, más bien la falta del mismo a nivel institucional. Los únicos avances son los producidos por la conducta de la ciudadanía. Te recomiendo que lo leas. Destaca el titular: "¿Por qué no se denuncian de una vez por el Estado los Acuerdos con la Santa Sede y se aplica la Constitución en lo que a separación de la Iglesia y el Estado se refiere?".

Yo voy a más. ¿No es cierto que bares y comercios que ocupan espacios públicos pagan su correspondiente tasa municipal? Pues doy una idea: que todos los monumentos de carácter religioso que ocupan espacios públicos también lo hagan, que paguen el correspondiente impuesto.

¿Se imaginan el respiro que supodría para las arcas municipales si la Iglesia por sus edificios pagase el IBI como lo hace todo hijo de vecino?

¿O que pagase el impuesto de sociedades, al igual que cualquier otra empresa en el Estado español, con actividad económica?

domingo, 14 de diciembre de 2008

La cultura en la calle

En EL PAIS del sábado 13, se comenta el Plan de inversión municipal que el gobierno nacional ha puesto en marcha, dedicando un fondo de 8 mil millones de euros. Jerez (6), Burgos (6) y Murcia (6) son los municipios que más proyectos han presentado.
Se trata de crear puestos de trabajo a la vez que se adelantan inversiones que estaban esperando por falta de dinero. Esto está bien. Sobre todo si se trata de mejorar la ciudad en sus infraestructuras, como parece ser que se hará. Bienvenido sea todo el dinero que suponga una mejora de la calidad de vida de la ciudadanía. Y la cultura es una faceta muy importante en la calidad de vida de las personas.

Da gusto ver cómo se convierten las calles en sitio de encuentro y de lugar para la cultura. Como es el caso en mi pueblo con la exposición de esculturas "Los silencios de Colón", en diversos lugares del centro.

O un original y ecológico abeto, construido con botellas de cristal.

O en Sevilla, una exposición de esculturas de Rodin, en la Plaza Nueva, junto al Ayuntamiento, donde "El pensador" ocupa lugar preferente.

Verdaderas joyas arquitectónicas las de este artista.

"El pensador", figura que parece discurrir, sobre el fondo de un edificio de una conocida entidad financiera, en cómo poder quitarse de enmedio a los sinvergüenzas de Wall Street que, montando estafas descomunales, han minado para siempre el sistema económico mundial, perjudicando -como nunca antes- a las clases más desfavorecidas.

domingo, 7 de diciembre de 2008

Barandillas



¿Te has fijado en la barandilla que hay en el borde de la acera? Pues yo creo que cumple varias funciones, a saber: obligar a los peatones a que atraviesen la calzada por su sitio, por el paso de cebra. También a protegerlos del tráfico de los coches y a evitar que éstos se suban a las aceras. Porque aparcar, pueden hacerlo en la zona que se ve más al fondo, un aparcamiento al lado de la estación del tren, ¡gratuito!



En mi pueblo debe haber barandillas de este tipo, aunque no deben prodigarse mucho porque no recuerdo dónde las he visto, y mira que ando. También hay estación de tren, y un aparcamiento subterráneo al lado, pero de gratis, nada, bien caro que es. En la estación ferroviaria de Dos Hermanas (Sevilla) el aparcamiento subterráneo ha sido gratuito durante mucho tiempo. Me cuentan que ahora lo es durante la primera hora. Bueno, algo es algo.



Si se trata de velar por la seguridad del peatón, en mi pueblo son más drásticos: se les impide atravesar la calle y listos. En la foto puedes ver cómo se hace, al menos durante una semana al año. Una doble barrera, sin remilgos.


La primera foto fue tomada muy cerca de la estación del tren del municipio de Tres Cantos (Madrid), modélico en una amplia variedad de temas urbanísticos, y no tanto en otros.


Hay un trabajo interesantísimo sobre este singular pueblo cercano a la capital del reino realizado por un grupo de estudiantes de Sociología. Y me enorgullece decir que en ese grupo se encuentra uno de mis hijos. "Crecimiento urbanístico en Tres Cantos", es el título de esta investigación.

miércoles, 3 de diciembre de 2008

Yo, paso de peatones

¡Qué gracioso! ¡Un coche de época! ¿Cuarenta, cincuenta años? O más. Yo creo que este Citroën ya salía en las pelis sobre la segunda guerra mundial.

Y digo yo, ¿no ha tenido tiempo su conductor para aprender que el semáforo en rojo significa pararse? Fíjense si no en la luz para el peatón, que está en verde.

Una buena multa y mandar el coche (y a su conductor) al museo.

(Realmente había un policía local de tráfico, dando paso a una caravana de coches de época que paseaba por Jerez, y que no ha salido en la foto. Pero valga como llamada de atención a los conductores, que deben velar por la salud de los peatones; cada vez quedamos menos)