
Si buscas en Internet comprobarás que el coste de tal aventura está alrededor del millón de euros. Sí, millón de euros. Traducido a pesetas: una verdadera burrada.
Se podría emplear ese millón en el desarrollo del deporte base o mejor, dadas las actuales circunstancias, en hacer que los impuestos y tasas que pagamos se empleen para lo que fueron diseñados: basura, alcantarillado, limpieza, etc.
Yo no sé en qué piensa nuestra alcaldesa García Pelayo así como el resto de la corporación municipal (toda la corporación, no sólo la parte del PP) que no ven -o no quieren ver- más allá de sus narices. Se pueden echar a un lado y dejar que otras gentes con ideas más frescas y lógicas puedan hacer algo por nuestro pueblo. Quizá es que llevan demasiado tiempo pegados al sillón (y esto tampoco lo ven).
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