Dando una vuelta hace unos días por el castizo (y para mí muy entrañable) barrio de San Miguel máquina de fotos en ristre, no me pude resistir a tirar unas cuantas a lo que me encontraba por delante. Dentro de poco nuestro pueblo se convertirá en "Jerez, la ciudad de los bolardos rotos". La verdad es que quedan muy pocos. A éstos creo que algún organismo internacional con mucho prestigio debería declararlos Patrimonio de la Humanidad, por su escasez.
No he tenido la oportunidad de ver cómo se "revienta" un bolardo de estos, y si se hace intencionadamente o no. Deberíamos hacer una encuesta por los talleres chapistas y preguntarles cómo les va el negocio. Para mí que hoy por hoy debe ser muy bollante, a la vista de lo que decimos. A no ser que se empleen otros medios distintos y sean los propios vecinos quienes se encarguen de su extinción... para poder aparcar su amado y nunca suficientemente venerado coche.
La foto de los bolardos-que-no-están es de la calle Barja. Si seguimos hacia la plaza de la Cruz Vieja, nos encontramos con rastros de otros ciudadanos (es un decir). Éstos pueden mostrarse muy solidarios en estas fechas con alguna ONG (se creen ellos que se van a ganar con eso una parcelita en el cielo) pero muy desconsiderados con los peatones, pues tienen que bajarse de la acera porque esos monstruos dejan aparcados sus coches en sitio prohibido. Además, pueden provocar unos de los accidentes más frecuentes en las ciudades: el atropello.
Mientras tanto sigo pensando que para qué nos sirve la Policía Local. Innumerables veces los veo pasar ante situaciones como la descrita, impasibles. Es más, la propia Policía local comete esta infracción (la de aparcar el vehículo en la acera, todavía no he visto a ninguno romper un bolardo, pero sólo es cuestión de paciencia...)
Sinceramente, a veces pienso que debo estar equivocado, que esto de aparcar en las aceras, obligando a los peatones a bajarse de las mismas y tener que ir por la calzada con el peligro de que te atropellen debe ser algo permitido por el código de la circulación, el civil y el penal, pues muchos lo hacen. Pero no, ¿verdad? ¿A que no está permitido? Si mal actúan quienes lo hacen, también actúan mal quienes lo permiten, la Autoridad.
Menos mal que una vez llegamos a la Cruz Vieja (actual calle Ramón de Cala), justo al lado del monumento a Lola Flores, nos integramos en una zambomba que celebraba la Peña Colchonera, el mismo sábado en el que el Atlético de Madrid le metió al Xerez un 0-2. No me extraña que tengan el corazón roto.
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4 comentarios:
La cuestión ya no es de peatones, sino de ¿y si pasa alguien con una sillita de ruedas?
¿Solo tiene la culpa la Policia Local?
Yo creo que debe existir además de educación del ciudadano, voluntad política.
Y me da la impresión que no existe.
De acuerdo en lo de la educación de la ciudadanía, pero meter a la política en esto es demasiado, si nuestra clase política tuviera que ir detrás de cada vandalismo ciudadano, te aseguro que no habría impuestos bastantes para mantener sus 24 horas de actividad, para eso tenemos una policía local que debe estar presente, que para eso tienen turnos y horas extras, muy bien pagadas por cierto.
Los politicos tienen mucho que decir, NO tienen que ir detrás de nadie, pero el responsable final de la policia local es la Administración Local, tienen que asumir sus obligaciones y entre ellas está coordinar y dirigir la actuación de la policia.
que yo sepa no es un cuerpo autonomo.
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